El Poder Judicial de Ecuador está constituido por todos los
tribunales de la República de Ecuador, ordinarios y especiales, bajo la
dirección de la Corte Nacional de Justicia. Los tribunales son los encargados
de conocer, juzgar y ejecutar todas aquellas causas que la Constitución y las
leyes han puesto en la esfera de sus atribuciones.
La Constitución en su artículo 167 señala que «La potestad
de administrar justicia emana del pueblo y se ejerce por los órganos de la
Función Judicial y por los demás órganos y funciones establecidos en la
Constitución